Internacional
En las películas de Hollywood, los
sospechosos comunes de planear o haber cometido algún ataque mortal en Estados
Unidos solían ser extremistas islámicos, radicales de izquierda, anarquistas o
revolucionarios negros. Ya no es así.
Desde hace doce años, extremistas
atentan principalmente contra judíos, latinos, negros, gays, abortistas, a
quienes consideran “plagas de subhumanos”.
De 2013 a 2022, de un total de 335
muertes por atentados ideológicos, sólo la cuarta parte es atribuida a esos
grupos, que en las décadas anteriores fueron los principales responsables.
Los nuevos protagonistas, con un
predominio casi completo, provienen de la extrema derecha: son principalmente
supremacistas blancos, más pequeñas participaciones de militantes
anti-gobierno, sujetos con masculinidad tóxica y activistas contra el aborto:
ellos han cometido el 75 por ciento de estas agresiones; según un informe
de la Liga AntiDifamación, una organización centenaria con sede en Nueva York y
oficinas en todo el país.
Esta tendencia, además, se agudiza: en
2022, todos los asesinatos por motivos ideológicos fueron perpetrados por
ultraderechistas.
Fuente: Milenio